domingo, 12 de agosto de 2018

DEATH WISH



Remake the aquella del '74 con Charles Bronson. Y como suele pasar, hay voces que afirman que la original es mejor. No te voy a mentir: la de Bronson la ví cuando era chico en algún canal de aire, pero ni me acuerdo. Lo que sí te puedo decir, como fan de Bruce Willis, es que no sé cuan bien elegido para el rol estuvo. Sí...estoy de acuerdo: Willis es el nuevo Nic Cage, con papeles e interpretaciones menos que memorables, pero...esta nueva versión de "El justiciero" no es horrible...lo cual es un buen comienzo. El problema es que el viejo Bruce no puede dejar su interpretación de John McClane en "Duro de Matar", y realmente no le calza a la película.
Willis interpreta a Paul Kersey, médico cirujano acostumbrado a ver la violencia en su Chicago natal, pero como profesional que es, siempre distanciado emocionalmente de la misma. Hasta que le toca de cerca y su mujer e hija son atacadas en su casa cuando una entrada forzosa por parte de unos delincuentes sale mal. De ahí en más, el doctor que hasta hace poco no sabía nada de armas se convierte en "El Ángel Guardián" de la "ciudad de los vientos", eliminando a cuanto criminal se le cruza en el camino con tal de dar con quien arruinara su vida.
Esta nueva versión de "Death Wish" tiene cambios con respecto a la original, lo cual no está mal: en vez de New York ahora es Chicago, en vez de Kersey ser arquitecto es médico -.
También tiene acción al estilo"vigilante", lo cual es parte de la esencia de la historia.
Lo que no tiene es sentimiento. La apatía demostrada por Willis (de quien, insisto, soy gran fan) es insoslayable; sus lágrimas se ven realmente forzadas, y el odio, resentimiento y angustia que debería demostrar, son más bien un frío "ajuste de cuentas".
También está el tema político de fondo: la portación de armas y todo el debate que se está dando en USA, donde el director es bastante explícito en cuanto a su opinión.
No obstante, un film que otrora impactara al espectador por su crudeza y la impotencia / angustia demostrada por las víctimas, en esta nueva versión destaca por su falta, lo cual vuelve esta versión de Eli Roth (director de las "Hostel") bastante politicamente correcta.
En cuanto al guión...meh. Hay cosas que no se entienden, como el uso de máscaras por parte de quienes irrumpen en la casa de Kersey si es que pensaban que iba a estar vacía, o la mera existencia del personaje interpretado por Vincent D'Onofrio.
No es un film malo, pero hace que los últimos 2 films en la saga de "Taken" luzcan muy buenos.

FICHA TÉCNICA:          
PAÍS: USA
AÑO: 2018   
GÉNERO: acción / crimen / drama
DURACIÓN: 107 minutos
GUIÓN: 5 /10  
DIRECCIÓN: 4 /10
ACTUACIONES: 5 /10
CGI: 6 /10
PRESUPUESTO / GANANCIAS: US$ 30.000.000 / US$ 34.017.028
RATED: PG-16


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